Mi mami

Siempre estamos ajetreadas con cientos de cosas, cada cual por su lado, cada una con sus follones, pero aún estando lejos no ha habido día que no te sienta a mi lado. Con un simple buenos días, eres capaz de percibir como me siento. Escribir esta historia junto a ti, el poder formar parte de nuestro libro compartiendo nuestro día a día, es uno de los mayores regalos que me ha dado esta vida pixelada. Asomé mi tímida cabecita cuando aun era una corderilla rubia que no dejaba de chinchar y dar la lata allá donde estuviera, y tu me abriste los brazos para dejarme llenar de pintarrajos las paredes de nuestra casa (es hereditario lo se) y poner todo patas arriba sin dudarlo ni un segundo...y hasta hoy, teñida de moreno por eso de que "las rubias son tontas" (*se descojona), continuamos dándole la vuelta a lo que es imposible de girar, caminando juntas de la mano

Lobiu mamita